La onda vibratoria crea forma.
La forma no es más que un efecto de una vibración.
Todo es vibración y el sonido también.
La voz, el sonido, o la vibración que es lo mismo son el
efecto de una idea, de una idea creativa.
Ahora, con nuestros medios a nuestro alcance, es
más fácil entender lo que siempre e inmutablemente ha estado siempre ahí.
No cambia la realidad, cambia para nosotros porque
nosotros cambiamos y cambia nuestra forma de entender las cosas por qué los
elementos nos ayudan a ello, pero, siempre ha sido igual.
Y si ha sido igual hasta hoy, al menos en su
esencia, será siempre igual hasta mañana y hasta el mañana de todas las
mañanas, al menos hasta que la idea primaria de lo que es el origen de todas
las cosas, no cree otra cosa diferente, algo que a lo mejor podría pasar.
De hecho, le gusta innovar y nos manda para que le
digamos que es lo que se le ha ocurrido y cómo funciona lo que ha creado.
Así creador y creado interrelacionan.
Como creador es quien ha hecho este
ejemplo para expresar algo que sentía que era así.
En fin, cosas de la vida que no deja de sorprender
nunca porque justamente es infinita.
Quizás esto ayude a tomar conciencia del efecto de
la vibración que emitimos ya que, por ser a imagen y semejanza, somos
co-creadores, creadores al fin de cuentas
La clave de la mejor creación posible
está en la benevolencia del pensamiento.
Ello da forma armoniosa ya que creado está en
correlación directa a la armonía del origen que lo causa.
Hay notas tónicas y distónicas, hay creaciones
armoniosas y desarmoniosas, y que sea así es una ley del juego de la vida.
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